Un excéntrico experto en crear ambientes. Sébastien Tellier es un cantante, compositor y multifacético instrumentalista francés. Canta en inglés, francés e Italiano. Si bien nunca ha logrado mucho reconocimento a nivel internacional, si ha captado cierta atención. Por ejemplo, ha contribuido a películas como Narco y Lost in Translation. A pesar de tener varios discos, hay dos que creo que merecen oreja.
El primero se trata de Sessions (luego rebautizado como Universe), que es una compilación con sus canciones más populares previas a 2006. En éste luce su genio, principalmente solo con su piano. Personalmente creo que se trata de un disco calmado, íntimo, una experiencia casi personal, como para escuchar en una caminata solitaria o en un momento de relajo. Dentro de éste es necesario subrayar La Ritournelle, fantástica en su versión original, y de la cual hay varios remixes dignos de escuchar (Mr Dan, Metronomy y Jake Bullit), pues parece que cada uno logra darle un giro distinto. Otro gran tema es Black Douleur, en el que Tellier, a solas con su teclado, saca lo mejor de si.
El segundo disco es Sexuality (2008). Se notan en este de inmediato las influencias más modernas, y cómo no, si fue producido por Guy-Manuel de Homem-Christo (una de las mitades de Daft Punk). Como su nombre lo indica, a través de este Tellier trata de representar todo lo erótico, rayando incluso en lo explícito, lo que incluye gemidos. Un disco en su mayor parte lento y lascivo, que podría sonar tanto en un cabaret como en el dormitorio de algún iluminado valiente. En esta placa resaltan de inmediato temas como Roche, que es porno por decir lo menos, la bailable y encamable Kilometer y L'amour et la Violence, en el que Tellier retoma la intimidad con su piano.
El primero se trata de Sessions (luego rebautizado como Universe), que es una compilación con sus canciones más populares previas a 2006. En éste luce su genio, principalmente solo con su piano. Personalmente creo que se trata de un disco calmado, íntimo, una experiencia casi personal, como para escuchar en una caminata solitaria o en un momento de relajo. Dentro de éste es necesario subrayar La Ritournelle, fantástica en su versión original, y de la cual hay varios remixes dignos de escuchar (Mr Dan, Metronomy y Jake Bullit), pues parece que cada uno logra darle un giro distinto. Otro gran tema es Black Douleur, en el que Tellier, a solas con su teclado, saca lo mejor de si.
El segundo disco es Sexuality (2008). Se notan en este de inmediato las influencias más modernas, y cómo no, si fue producido por Guy-Manuel de Homem-Christo (una de las mitades de Daft Punk). Como su nombre lo indica, a través de este Tellier trata de representar todo lo erótico, rayando incluso en lo explícito, lo que incluye gemidos. Un disco en su mayor parte lento y lascivo, que podría sonar tanto en un cabaret como en el dormitorio de algún iluminado valiente. En esta placa resaltan de inmediato temas como Roche, que es porno por decir lo menos, la bailable y encamable Kilometer y L'amour et la Violence, en el que Tellier retoma la intimidad con su piano.
"...Forever journeys on golden avenues
I drift in your eyes since I love you
I got that beat in my veins for only rule
Love is to share, mine is for you..."
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